Hasta la manzana más sana puede estropearse

¿Un seguro de salud? Pero… ¿lo necesito de verdad? Pero si estoy más sano que una manzana.

Puede que, de momento, tu salud esté bien y que, salvo algún catarro por el cambio de estación, consideres contratar un seguro de salud como un gasto innecesario.

Pero, pero, pero… espera.

Ya es otoño, el año empieza a decirnos adiós poco a poco. Estamos más en casa, tenemos más tiempo para reflexionar y hacer balance, no solo económico, para el próximo año. Vamos a sentarnos un ratito en el sofá con la manta y pensar un poco más despacio en esos «peros» sobre el seguro de salud.

Lo primero es antes. Das prioridad al bienestar de tu familia y, por supuesto, al tuyo. Si no te proteges, no puedes proteger a quienes te importan. Un seguro de salud es ese compañero silencioso que estará ahí cuando lo necesites. No solo en las emergencias.

Pero es un gasto más

A simple vista puede parecerlo, y es comprensible. Sin embargo, no nos damos cuenta de cuánto nos puede costar no estar protegidos. Un seguro de salud no solo cubre emergencias médicas, sino que también te permite acceder a servicios preventivos. Una simple consulta privada puede costar más que un mes entero de tu seguro.

Pero si estoy bien…

Sí, hoy estás bien. Pero al igual que el año cambia de estación cuatro veces, tu salud también puede sufrir un cambio inesperado. Nadie está libre de una caída accidental, una infección o la necesidad de un tratamiento que no esperabas.

Pero prefiero pagar solo cuando lo necesite

Parece razonable, pero lo cierto es que, en un imprevisto de salud, los gastos médicos pueden acumularse rápidamente. Desde una simple consulta hasta exámenes o cirugías. Tener un seguro significa no tener que elegir entre tu bienestar y tu tranquilidad económica.

Y mientras, ¿es-pero?

Cuando se trata de consultas o cirugías no urgentes, las listas de espera pueden convertirse en una verdadera agonía. Un seguro de salud te permite agilizar estos procesos, para que no tengas que esperar meses por una consulta importante o una cirugía que, aunque no sea urgente, es clave para tu bienestar.

Pero la salud mental ¿está incluida?

Buenas noticias: algunas pólizas ya incluyen coberturas específicas para el cuidado emocional y psicológico. Porque no solo se trata de tu cuerpo, sino también de tu mente, y ambas merecen la misma atención.

¿Pero tengo que ir a tu oficina?

Sí, porque en Félix Valero Correduría de Seguros, damos la cara por tu salud. Y si te queda algún «pero» por resolver, cuenta con nuestra ayuda para tomar la mejor decisión.

Ahora es buen momento para contratar una seguro para cuidar de tu salud y la de los tuyos con las coberturas que necesitas. Contáctanos, estamos aquí para ti. Para escucharte, resolver tus dudas y asegurarnos de que, pase lo que pase, estés protegido.

 

Foto de Jonathan Borba en Unsplash